Grandvalira y Ordido Arcalís, junto con las autoridades sanitarias del Gobierno de Andorra, desarrollaron un plan de prevención que tiene como objetivo garantizar un entorno seguro, tanto para los turistas como para los habitantes del país.
Se practicarán test regularmente al personal de los dominios esquiables, así como a los trabajadores del sector turístico y vinculado al comercio de todo el país, para garantizar la seguridad de la población y la tranquilidad de los turistas y visitantes.
Las estaciones de Grandvalira Resorts prevén abrir el 100% de sus pistas este invierno, siempre y cuando las condiciones de nieve lo permitan. El compromiso de ofrecer un producto de máxima calidad de Grandvalira y Ordino Arcalís se mantiene inalterable a pesar de la situación actual, marcada por el impacto de la COVID-19.
Para garantizar el más alto nivel de calidad sobre las medidas COVID-19 adoptadas por las estaciones, estas serán certificadas por compañías del prestigio de Bureau Veritas y OCA.